La ortodoncia consiste en alinear los dientes para conseguir una sonrisa más atractiva y definida. En ocasiones se puede pensar que el hecho de corregir la alineación de los dientes en la boca es una cuestión meramente estética, pero lo cierto es que tener una mala oclusión (mordida) puede afectar a la masticación, al habla o incluso a la respiración.
En la actualidad existen distintos tipos de ortodoncia dependiendo del caso a tratar. Por un lado, esta la ortodoncia removible, que se emplea en los niños para mover los dientes, modificar el crecimiento y corregir hábitos. Como segunda opción, está la ortodoncia fija con brackets, que pueden ser metálicos o estéticos. Y, por último, la ortodoncia invisible, que emplea férulas transparentes que son más discretas.
Cualquier tipo pueden ser utilizadas a cualquier edad, tanto en el niño como en el adulto.
En Clínica Dental Cobos utilizamos varios tipos de brackets, pero desde hace 10 años usamos la técnica DAMON, que consiste en usar brackets de autoligado, sin gomas, que con arcos superelásticos y utilizando fuerzas muy ligeras conseguimos reducir el número de visitas y acortar el tiempo de tratamiento dependiendo del caso. De esta manera, se pueden conseguir resultados de 9 a 15 meses de media.
Para pequeñas correcciones en adultos que no quieren mostrar los brackets, usamos la técnica de ortodoncia invisible, que consiste en colocar férulas transparentes que se cambian cada dos semanas y consiguen unos magníficos resultados.
Caso clínico 1 — 11 meses de tratamiento:
Caso tratado con ortodoncia fija Damon resuelto en tan solo 11 meses.
Caso clínico 2:
Aquí os mostramos un caso resuelto en un año con estos excelentes resultados.
Caso clínico 3:
Otro caso con resultados magníficos tratado con ortodoncia fija.
Caso clínico 4:
Otro paciente satisfecho con su tratamiento de ortodoncia con brackets.
Caso clínico 5:
Paciente de ortodoncia empleando férulas invisibles.
